PROTOTYPE 00

intervención sobre imagen de Charless Crumb, de ODIO EL ARTE.

El infinito quebrado, sin la vuelta final,
el ADN incompleto,
ausencia de la mitad,
todo lo inabarcable te espera
para adquirir la forma,
que le quieras dar:

¿de quienes son los ecos
que suben,
bajan,
por los peldaños que decido cruzar?
¿quienes recorrieron el espiral,
persiguiendo sueños,
escapando de un asesino,
o simplemente caminando,
sin saber
(nunca muy bien)
por qué caminar?
¿debería interpretar esos sonidos,
como un mensaje,
en clave, 
una amenaza,
una explicación?
quizás, si los sonidos se combinaran,
quizás si lograra no aislar las palabras,
nunca dejarme engañar,
por el final,
tan ansioso de besarme,
como yo por poderlo abrazar:
“tranquilizate,
nada terminó,
nada va a terminar,
no es necesario que tenga sentido
basta con que no deje de empezar…”

Regresar
Nunca
Es
Regresar
melodía,
ritmo,
y la poesía 
de la repetición:

ya salté de éste precipicio,
en un abismo anterior,
tal vez portando un tesoro,
escapando de la inquisición,
tal vez en una noche demasiado larga,
con tristeza
y algo de determinación,
¿no es fácil imaginar que la escalera es sólo una columna vertebral?
¿qué esqueleto habito?
¿quién me va a habitar?

mirá a tu alrededor,
eternizá la postal:
somos una ciudad-invierno,
mil ventanas sin mirar,
cegadas por el brillo
que nunca se extinguirá:
una 
pared 
blanca 
y
proyectar.

Podría atravesar mis fantasías
(las tuyas)
y romper el cristal:
la velocidad desintegra los cuerpos:
soy el primer escalón que vas a pisar.